Este es un comentario habitual entre los fumadores a punto de dejar de serlo o los ex fumadores recientes.
Por qué temen esto?
Mientras era fumador , el sólo hecho que alguna persona les dijera “qué bueno sería que dejes” lo irritaba.
Cuando en un restaurante o cualquier otro lugar , estaba prohibido fumar, también se irritaba.
Si algún amigo , hijo o familiar, había dejado de fumar y le pedía que no fumara cerca (seguramente por temor a tentarse), también le molestaba.
El fumador se altera cuando los demás (o las reglas), le piden que haga (o que no haga) algo para lo cuál no está preparado.
Cuando, posteriormente, se encuentra en el proceso de dejar, lo primero que reconoce es que padece una enfermedad: la adiccion a la nicotina.
Que para recuperarse de ella, va a necesitar de TODA la ayuda que los demás puedan darle.
Que, en ese contexto, pedirle a alguien muy cercano que no fume en nuestra presencia, lejos de ser una actitud totalitaria o fundamentalista, es un signo de nuestra debilidad.
Posteriormente, cuando pasen algunas semanas o meses que dejó, es probable que comience a no gustarle el humo o que tome conciencia que ese humo ( HAT – humo ambiental de tabaco), es tóxico y daña la salud. Y que si con tanto esfuerzo logró salir de él, probablemente ya no lo quiera en su vida.
Esta decisión no es fundamentalista , es una apuesta a la vida saludable.
No temas a tu cambio de opinión. Por el contrario, dejar de pensar como un fumador te ayudará para evitar la recaída.
Forma parte del CAMBIO DE VIDA que significa dejar de fumar.
Podes acceder a toda la información sobre el tratamiento dejando tu nombre y teléfono en Instagram o en whatsapp:
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Esta reunión es gratuita y no te compromete a realizar el tratamiento.